Bruselas, 12 de junio de 2024.

Como parte de su investigación en curso, la Comisión ha llegado a la conclusión provisional de que la cadena de valor de los vehículos eléctricos de batería en China se beneficia de subvenciones desleales, lo que representa una amenaza de perjuicio económico para los productores de estos vehículos de la UE. La investigación también examinó las posibles consecuencias y el impacto de las medidas en los importadores, usuarios y consumidores de vehículos eléctricos de batería en la UE. Sobre la base de las conclusiones de la investigación, la Comisión ha concluido, de manera provisional, que redunda en interés de la UE remediar los efectos de las prácticas comerciales desleales constatadas, mediante la imposición de derechos compensatorios provisionales sobre las importaciones de vehículos eléctricos de batería procedentes de China.

Por consiguiente, hoy la Comisión Europea ha realizado una comunicación previa a las partes interesadas indicando el nivel de los derechos compensatorios provisionales que se propone imponer a las importaciones de vehículos eléctricos de batería procedentes de China. Paralelamente, la Comisión se ha puesto en contacto con las autoridades chinas para debatir estas conclusiones y las posibles formas de resolver la cuestión. Los derechos individuales que la Comisión tiene previsto aplicar a los tres productores chinos incluidos en la muestra serán los siguientes:

– BYD: 17,4 %;

– Geely: 20 %; y

– SAIC: 38,1 %.

Otros productores chinos de vehículos eléctricos de batería que cooperaron en la investigación pero que no han sido incluidos en la muestra estarán sujetos al siguiente derecho medio ponderado: 21 %. Todos los demás productores chinos de vehículos eléctricos de batería que no cooperaron en la investigación estarán sujetos al siguiente derecho residual: 38,1 %.

Las conclusiones provisionales de la investigación antisubvenciones de la UE indican que toda la cadena de valor de los vehículos eléctricos de batería se beneficia en gran medida de las subvenciones desleales en China, y que la afluencia de importaciones chinas subvencionadas a precios artificialmente bajos representa, por lo tanto, una amenaza de perjuicio claramente previsible e inminente para la industria de la UE.