Digitalización
El segundo informe sobre el estado de la Década Digital pide que se refuerce la acción colectiva para impulsar la transformación digital en la UE
La Comisión ha publicado hoy el segundo informe sobre el estado de la Década Digital, que ofrece una visión global de los avances realizados en la búsqueda de alcanzar los objetivos y metas digitales establecidos para 2030 por el programa estratégico de la Década Digital. Este año, por primera vez, el informe va acompañado de un análisis de las hojas de ruta estratégicas nacionales para la Década Digital presentadas por los Estados miembros, en el que se detallan las medidas, acciones y financiación nacionales previstas para contribuir a la transformación digital de la UE.
El análisis de la Comisión muestra que, en el escenario actual, los esfuerzos colectivos de los Estados miembros no alcanzarán el nivel de ambición de la UE. Las lagunas detectadas incluyen la necesidad de inversiones adicionales, tanto a escala nacional como de la UE, en particular en los ámbitos de las capacidades digitales, la conectividad de alta calidad, la adopción de la inteligencia artificial (IA) y el análisis de datos por parte de las empresas, la producción de semiconductores y los ecosistemas de empresas emergentes.
Tanto la UE como los Estados miembros tienen un papel importante que desempeñar a la hora de hacer cumplir el nuevo marco jurídico, adoptar medidas para fomentar la difusión de las tecnologías digitales y garantizar que sus ciudadanos estén dotados de capacidades digitales adecuadas para beneficiarse plenamente de la transformación digital. Esta es la razón por la que el informe de este año es un llamamiento para que la acción reforzada de los Estados miembros sea más ambiciosa, ya que la consecución de los objetivos de la Década Digital en materia de infraestructuras digitales, empresas, capacidades y servicios públicos es fundamental para la futura prosperidad económica y la cohesión social de la UE.
En este contexto, la Comisión también actualizó las recomendaciones específicas por país y transversales para que cada Estado miembro de la UE subsanara las deficiencias detectadas.
Una UE competitiva, soberana y resiliente: infraestructuras digitales y empresas.
La adopción y el desarrollo de tecnologías innovadoras es crucial para la competitividad de Europa, en particular en el panorama geopolítico actual y debido al aumento de las amenazas a la ciberseguridad, lo que exige una mayor resiliencia y unas medidas de seguridad sólidas.
El informe destaca que la UE dista mucho de alcanzar los objetivos de conectividad establecidos por el DPP: Las redes de fibra, fundamentales para ofrecer conectividad de gigabit y permitir la adopción de tecnologías de vanguardia como la IA, la nube y la internet de las cosas, solo llegan al 64 % de los hogares. En la actualidad, las redes 5G de alta calidad solo alcanzan el 50 % del territorio de la UE y su rendimiento sigue siendo insuficiente para prestar servicios avanzados de 5G. Para hacer frente a estos retos, los Estados miembros y la Comisión deben colaborar para fomentar un mercado único digital verdaderamente funcional.
En 2023, la adopción de la IA, la nube o los macrodatos por parte de las empresas europeas también se situó muy por debajo del objetivo del 75 % de la Década Digital. Según las tendencias actuales, solo el 64 % de las empresas utilizarán la nube, el 50 % los macrodatos y solo el 17 % la IA de aquí a 2030. Para lograr la digitalización del sector empresarial, es fundamental incentivar la adopción de herramientas digitales innovadoras por parte de las pymes, en particular la nube y la IA, así como movilizar más inversiones privadas en empresas emergentes de alto crecimiento. Esto es crucial para mantener la competitividad de Europa en lo que respecta a la innovación, la eficiencia y el crecimiento basados en los datos.
Otro reto importante al que se enfrenta la transformación digital de la UE sigue siendo la limitada difusión de las tecnologías digitales más allá de las grandes ciudades. Para hacer frente a esta brecha digital, es fundamental fomentar la cooperación entre los agentes europeos a escala transfronteriza y local, por ejemplo a través de proyectos plurinacionales, centros europeos de innovación digital (EDIHs) y Consorcios de Infraestructuras Digitales Europeas (EDIC). Desde el año pasado se han logrado una serie de éxitos en este sentido, con tres EDIC creados a finales de mayo de 2024.
Una política digital para las personas y la sociedad: competencias digitales y servicios públicos.
Situar a las personas en el centro de la transformación digital de nuestras sociedades y economías es el núcleo de la Década Digital y del primer principio de la Declaración sobre los Derechos y Principios Digitales.
En la actualidad, los objetivos en materia de capacidades digitales establecidos por la Década Digital aún están lejos de alcanzarse, ya que solo el 55,6 % de la población de la UE tiene al menos capacidades digitales básicas. Según la tendencia actual, el número de especialistas en TIC en la UE se situará en torno a los 12 millones en 2030, con un desequilibrio de género persistente. Para alcanzar los objetivos, los Estados miembros deben seguir un enfoque polifacético para fomentar las capacidades digitales en todos los niveles educativos e incentivar a los jóvenes, en particular a las niñas, a que se interesen por las disciplinas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (CTIM).
Los Estados miembros están avanzando hacia el objetivo de hacer accesibles en línea todos los servicios públicos clave y los historiales médicos electrónicos a los ciudadanos y las empresas, así como proporcionarles una identificación electrónica segura. A pesar de la desigual utilización entre los Estados miembros, la identificación electrónica está disponible actualmente para el 93 % de la población de la UE y se espera que la cartera de identidad digital de la UE incentive su uso. Sin embargo, en un escenario sin cambios, la consecución del 100 % de los servicios públicos digitales para los ciudadanos y las empresas de aquí a 2030 sigue siendo difícil.
Próximos pasos.
Los Estados miembros tendrán que revisar y ajustar sus hojas de ruta nacionales para ajustarse a la ambición del programa estratégico de la Década Digital antes del 2 de diciembre de 2024. Tal como se establece en el PDPD, la Comisión supervisará y evaluará la aplicación de estas recomendaciones e informará sobre los avances realizados en el próximo informe sobre el estado de la Década Digital, en 2025. (1 700 millones EUR).
El segundo informe sobre el estado de la Década Digital pide que se refuerce la acción colectiva para impulsar la transformación digital de la UE