01/07/2019 | ElPais
La lucha contra el cambio climático fue la espina dorsal que permitió vertebrar un nuevo Gobierno progresista en Finlandia. El Ejecutivo, encabezado por el socialdemócrata Antti Rinne, se ha fijado como reto liberar por completo a su economía de emisiones de dióxido de carbono en 2035. El país, que a partir de este lunes ostenta la presidencia rotatoria de la UE, quiere extender ese modelo de gestión verde al resto del continente y atar antes de finales de año un acuerdo que comprometa a los Veintiocho a una economía descarbonizada en 2050.