26/03/2018 | El País
Completar la eurozona exige un activo libre de riesgo —eurobonos: una palabra proscrita en Alemania— y un presupuesto anticrisis. Holanda capitanea un grupo de socios europeos que se oponen férreamente a esa idea. Alemania tampoco quiere una capacidad fiscal, a pesar de que Bruselas y París han presentado ambiciosas propuestas al respecto. El FMI se ha metido este lunes de lleno en ese debate: su directora gerente, la francesa Christine Lagarde, ha reclamado la puesta en marcha de una capacidad fiscal del 0,35% del PIB: 40.000 millones de euros.