14/06/2018 | El País
Se ha llegado a un acuerdo sobre la directiva de energías renovables, que debe servir de guía para la transformación del sistema energético europeo para los próximos años. Finalmente, se ha acordado que el 32% de toda la energía final consumida en la UE en 2030 deberá ser de origen renovable. Es un punto intermedio entre la posición de partida de los Gobiernos de los 28, que propusieron un 27%, y la de la Eurocámara, que pedía un 35%.