17/11/2016 | El País
Europa endurece el acceso a sus fronteras por el terrorismo y la crisis migratoria. Los ciudadanos de terceros países no sujetos a visado que quieran viajar al área Schengen deberán obtener un permiso previo que permite a las autoridades comprobar si representan una amenaza para la seguridad del espacio de libre circulación. También detectar posibles migrantes irregulares. Será un documento similar al que exige Estados Unidos para entrar a su territorio y costará cinco euros, según el proyecto que ha presentado este miércoles la Comisión Europea.