26/07/2016 | El Periódico
La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, fue la primera dirigente europea en dejar claro que una Turquía con pena de muerte no tiene cabida en la Unión Europea y este martes ha sido el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, quien ha despejado cualquier atisbo de duda que todavia pudiera quedar en el bando del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Si Turquía llegara a reintroducir la pena de muerte supondría el fin “inmediato” de las negociaciones de adhesión.